Mi experiencia con la terapia en PSICODE
Mi psicóloga me ha pedido que escriba una carta en la que resuma mi experiencia con la terapia en Psicode. No es fácil sintetizar en unas líneas la revolución interna que te provoca el ir a terapia..
Cuando llegué a Psicode me encontraba agotada física y mentalmente. Tenía el ánimo por los suelos, me encontraba muy sola y el hacer cualquier cosa me costaba un triunfo.
El último año había sido difícil, a un cambio de índole laboral se le sumaron los problemas laborales de mi pareja y un problema de salud de un familiar. Cuando me quise dar cuenta me encontraba desbordada. En el único sitio en dónde me encontraba mejor era en el trabajo, me obligaba a mí misma a concentrarme y procuraba que mi poco ánimo no afectara negativamente a mi entorno laboral. He de decir que lo conseguí, y ahora , gracias a la terapia y con la perspectiva del tiempo, veo ese hecho como un rasgo positivo que en esos momentos me sentía incapaz de ver: me consideraba a mí misma “débil”, no había tenido recursos para superar esas situaciones adversas, no valoraba lo bueno que tenía en mi vida y había tenido que recurrir a la medicación. El hecho de que alguna persona de mi entorno no entendiera mi estado de ánimo contribuyó a me lo creyera aún más.
Durante unas semanas estuve evaluando la posibilidad de acudir a un psicólogo. Como no me hacía demasiada gracia la idea, opté por acudir a la terapia de grupo de ansiedad, pensé que igual me resultaría más fácil. Seríamos varios y todos tendríamos algo que contar, la terapia duraba hora y media, algo me aportaría y, si no me convencía, bastaba con no volver. El primer día con el grupo, a pesar de los nervios iniciales, todo fue bien: Marina, la psicóloga, me escuchó y me entendió… oh, milagro! no tenía que dar un montón de explicaciones y suplicar comprensión!. Mis compañeros de grupo contaron sus problemas y escucharon los míos sin interrumpir.. y sin juzgar; cuando terminó la sesión me sentía más relajada.
Desde ese momento empecé a relativizar mi situación y a mirarla desde otro ángulo: resulta que había personas que se encontraban igual o peor que yo, y eran personas normales, con sus estudios, trabajos y sus vidas, y yo no las consideraba débiles por encontrarse mal, es más, me parecía norma!; entonces, ¿por qué era tan dura conmigo misma? Al día siguiente tomé la decisión de asistir a terapia individual .
Antes de entrar a la primera sesión, mientras esperaba en la sala, me sentía extraña y nerviosa. Pensaba en cómo me las iba apañar para sintetizar todo lo que me pasaba por la cabeza y poder explicárselo a Sabela, mi psicóloga. Resultó más fácil de lo que esperaba y, al final de la sesión, las dos juntas fijamos pequeñas metas para llenar mi tiempo durante el fin de semana. Semana tras semana, fui aprendiendo a sustituir mis “debería” por “me gustaría” , a desmontar los pensamientos negativos, a no preocuparme tanto por el futuro y por la opinión de los demás, a mejorar mi asertividad, a no sentirme en la obligación de agradar a todo el mundo, a estar sola sin agobiarme e incluso disfrutar de ello.. Y así, poco a poco, fuimos espaciando las sesiones.
En cuanto a los problemas que me llevaron a acudir a terapia, algunos han mejorado y otros los he tenido que aceptar. Lo importante es que ahora, después de un año, me siento con más fuerza y con más recursos para poder enfrentarme a ellos y a los que vengan. Ahora comprendo que todos vivimos y superamos los problemas como podemos, pero puede llegar un momento que nuestros recursos mentales ya no nos sirven como antes y entonces es hora de pedir ayuda. Y no pasa nada… porque al fin y al cabo, nosotros mismos somos los responsables de intentar lograr nuestro bienestar.
Gracias Sabela, Marina e Hilario, por vuestra profesionalidad y cariño.
Yo cai en una depresión muy profunda, porque se me juntaron muchas cosas…..
Acoso laboral en el trabajo durante cuatro años,muy mala relación con mi marido durante varios años también y la muerte de mi abuela y al mes siguiente de mi tía.
No tenia ganas de vivir ni de nada…..
Me encontraba en una situación…que lo veía todo negro….y tenia mucho miedo,ansiedad y no podía dormir…no le encontraba sentido a mi vida…incluso llegue al extremo de pensar en el suicidio
Ahora poco a poco me voy encontrando mejor y gracias a la terapia…. yo la recomiendo al 100%
Marina es una gran profesional, una persona cercana y muy cariñosa
Me ha ayudado a valorarme mas, a ser mas fuerte y aprender a cómo enfrentarme a las situaciones
Mucha gracias Marina
Muchas gracias Miriam, tu esfuerzo y valentía ha sido la clave.
¿Seguro que aquí dejan poner comentarios?